Los domingos saben mejor en el brunch de Marriott Medellín en El Poblado

En El Poblado, el brunch dominical de Marriott Medellín se ha vuelto tradición: un recorrido de aromas, estaciones y conversaciones sin prisa.

The Place to Be — un lugar donde todo puede pasar en gastronomía, música y arte y mucho más—te invita a vivir el brunch más completo de Medellín en el corazón del barrio El Poblado: The Market en Marriott Medellín.

Hay lugares donde el domingo se siente más largo. En The Market y Circo Terraza, los restaurantes insignia de Marriott Medellín, el tiempo se estira entre el aroma del pan recién hecho, el brillo de una mimosa servida con calma y esa sensación de que el día apenas empieza, aunque el reloj diga otra cosa.

Brunchear aquí no es solo sentarse a comer. Es moverse, mirar, probar, conversar. En el brunch dominical de Marriott Medellín, todo está dispuesto para que los sentidos tomen el control: las bandejas de panes tibios, el café que perfuma el aire, los colores de las frutas recién cortadas, el murmullo amable de la gente que conversa sin prisa. Cada detalle parece diseñado para que uno simplemente se quede.

El recorrido es libre, casi intuitivo. Algunos comienzan por la estación italiana, donde las pastas se preparan al momento con salsas suaves, aceite de oliva y hierbas frescas. Otros se detienen en la parrilla, atraídos por los cortes jugosos o las hamburguesas que se arman al gusto, con pan artesanal y vegetales recién asados.

En una esquina, los colores de la cocina asiática se mezclan con el vapor del sushi recién hecho; en otra, la estación colombiano manda la parada con arepas rellenas, empanadas, tamales y arroz atollado que perfuma todo el aire. El buffet no es un desfile estático, sino una sucesión de aromas que te empujan a seguir descubriendo.

La panadería del Brunch dominical de Marriott Medellín es otro mundo: bandejas que entran y salen del horno, croissants que crujen, mantequilla derretida sobre panes dulces, pasteles con frutas que parecen recién cortadas. A pocos pasos, el olor a café recién molido marca el ritmo del lugar: las tazas se llenan, las mimosas tintinean, la sangría corre fría en las copas.

Entre todo eso, hay movimiento humano: familias que se reencuentran, parejas que alargan la sobremesa, grupos de amigos que van de estación en estación buscando “el nuevo favorito”. Nadie come en silencio. Se ríe, se comenta, se brinda. Se brunchea.

Y de fondo, la música. Una banda toca versiones suaves de rock latino, y el sonido se mezcla con el murmullo de las conversaciones. En un momento, el vocalista improvisa; alguien aplaude, otro levanta su copa. No hay prisa, no hay protocolo. Solo ese clima tibio que Marriott Medellín sabe crear cuando la gente se siente cómoda.

Brunchear aquí no es un plan: es una pausa que se expande. Todo está dispuesto para que el tiempo se estire, para que la comida se vuelva excusa y la experiencia, costumbre. Quien ha bruncheado aquí lo entiende: no se trata de lo que se sirve, sino de lo que se vive entre bocado y bocado.

Y por eso, en esta ciudad, ya no se dice “vamos a almorzar el domingo”. Se dice, simplemente: vamos a brunchear.

INFORMACIÓN Y RESERVAS

La tarifa por persona es de $140.000. No necesitas ser huésped para participar del brunch más completo de la ciudad, pero te sugerimos reservar con anticipación. Si necesitas más información, visita ThePlacetoBe.com, contáctanos por email: reservas.market.mdemc@r-hr.com o a por WhatsApp al +573212242168. Aplican términos y condiciones. La comida y bebida no está disponible para llevar.